jueves, 22 de octubre de 2009

Entrada de malvices y palomas

Los chaparrones del martes interrumpieron el inminente paso de aves migradoras sobre los cielos de la Comunidad Autónoma Vasca, tras aparecer los primeros bandos de torcaces.

El brusco cambio de tiempo con las lluvias de este pasado martes frenó el nutrido pase de palomas y zorzales registrado el lunes 19. Y es que ya con los fríos vientos procedentes del nordeste de la semana pasada, unos cuantos zorzales se comenzaron a ver desde nuestras costas en sus rutas hacia el interior; primero zorzales comunes los que llenaron a primera hora de la mañana los cielos desde el martes día 13, un pase que prosiguió el miércoles, jueves y viernes.

El sábado pasado, por el contrario, se atenuó durante la jornada la llegada de malvices, quedándose algunos ejemplares en las cotas más bajas en nuestros bosques, seguramente después de un largo viaje. Pero el domingo y este lunes volvieron a dejarse ver, no sólo en mayor cantidad sino también con más variedad y pasando a todo tipo de alturas.

Además de las malvices comunes, incluso este domingo asomaron, a distancias prohibitivas de disparo, numerosos bandos de zorzales alirrojos, el pájaro cazable más pequeño y al que le delata su profundo silbido desde distancias muy lejanas. También desde el domingo se comenzaron a ver bandos pequeños de zorzales reales o dúrdulas, el ave de mayor tamaño de la familia de malvices, junto al zorzal charlo. Tampoco quisieron desaprovechar la ocasión de sobrevolarnos algunos contados bandos de gansos en su largo camino hacia las zonas húmedas del sur peninsular, ofertando un espectáculo otoñal siempre difícil de olvidar.

Asimismo, con la notable llegada de malvices, parece que han aparecido las primeras becadas, al parecer de forma muy contada, para una modalidad que requiere de perro y de saber hacer entre el can y su amo, ampliando así las posibilidades de otra buena parte del colectivo de cazadores.

Palomas
En cuanto a las palomas, los primeros bandos de zuritas precedieron a la llegada de las primeras torcaces. Aunque suele afirmarse que los vientos del norte benefician más el pase por las tierras navarras, no parece de momento haber sido así este año. En cambio, con los vientos del sur y suroeste, los bandos azulados sí se dejaron notar este lunes pasado sobre nuestros cielos.
La web de las migraciones transpirenaicas (www.palombe.com) anotaba ya el domingo el avistamiento de más de treinta mil palomas, con lo que el anunciado viento del sur para el lunes prometía la llegada de bandos, y las predicciones no se equivocaron: desde media mañana por la costa y después de mediodía por los pasos de interior, los primeros bandos de torcaces se dejaban ver a media altura y también con algunos grandes bandos altísimos. Si desde diversos lugares se alertaba de la presencia de numerosos pájaros al otro lado de Pirineos, las dudas se comenzaban a despejar este lunes con los avistamientos y las primeras capturas. En palombe cifraron el lunes en casi cuarenta mil las palomas avistadas desde Urruña, y más de seis mil en los sendos pasos de Banka y Sara, dejando constancia de este primer movimiento serio de palomas de la presente campaña.
Las previsiones para el martes, con vientos más fuertes del sur y temperaturas cálidas, dispararon las alarmas para los puestos, aunque el anunciado frente de lluvias cortó de cuajo todas las expectativas, ya que comenzó lloviendo levemente desde primera hora de la mañana y de sur a norte, imponiéndose los chubascos desde el mediodía. Todos los aficionados a la paloma conocen que a este pájaro no le gusta el agua y que es muy raro que haya grandes movimientos si está lloviendo.
Las previsiones de vientos del suroeste para hoy, mañana y pasado, junto a algunas lluvias, tienen en máxima alerta a los palomeros en espera del gran día del pase de miles y miles de aves azuladas.
Javier Atxa Arrizabalaga

Fuente: DEIA

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