La “fiebre azul” se prolonga en Bizkaia

Tras una semana muy floja en la llegada de pájaros, este próximo y largo fin de semana ofrece otra buena oportunidad para salir en pos de malvices y palomas.

Se denomina “fiebre azul” en el argot cinegético a la inquietud generalizada que provocan entre los aficionados de la caza en puesto los bandos de palomas torcaces o “azuladas” por esta fechas de finales de octubre y primeros de noviembre. Esta fiebre se manifiesta y delata a los devotos a esta modalidad de caza de palomas por su vista recorriendo todos los cielos imaginables en busca de mínimas señales del posible paso, consultando todas las fuentes meteorológicas posibles en busca de los vientos más favorables y, últimamente y gracias a las nuevas tecnologías, llenando todos los foros de Internet posibles de cazadores con sus relatos, experiencias y opiniones. Lo que, por otra parte, permite conocer cómo transcurre la temporada con cierto grado de fiabilidad.

Y es que si el arranque de temporada se mostró esperanzador, la última semana no ha sido pródiga en la llegada de pájaros, a pesar de las fechas y de los vientos cambiantes. Así, el fin de semana mostró su mejor cara el sábado, pero salvo unas malvices a primera hora y algún bando de torcaces despistado, poco más. Por la tarde, diversos cazadores y hasta pescadores de nuestra costa avistaron muchos bandos desde primera hora de la tarde con bandos de los que no se sabe a ciencia cierta su paradero, ya que mientras algunos aseguraban su entrada hacia tierra, otros hablaban de su vuelo primero de ida y luego de retorno por la costa hacia Gipuzkoa. La verdad es que las condiciones climatológicas del sábado a la tarde eran las idóneas para verse palomas, pero en ningún sitio más de interior se confirmó el paso de todas estas torcaces. El domingo el fuerte viento sur paró seguramente el movimiento de los bandos de “azuladas”, algo que se prolongó el lunes, donde el agua y de nuevo el fuerte viento se hicieron presentes impidiendo ver nada más que algunos pájaros contados, echados seguramente en días anteriores, con la inmensa mayoría de “bolos” como resultado. Un resultado que se repitió anteayer martes, donde a pesar de la falta de lluvias, la sensación térmica fue mucho más fría, con viento, y donde ni palomas ni zorzales se dignaron tampoco en aparecer. Ayer el viento sur tampoco ayudó mucho al pase y solo los vientos del norte previstos para hoy, aunque con chubascos, podrían mejorar el balance con zorzales.

Así que retornando al capítulo de previsiones, el largo fin de semana que nos espera antes de la festividad de Todos los Santos ofrece nuevas expectativas para los muchos cazadores de puesto, además en las teóricamente mejores fechas, que ya veremos.

Revisando la web de “palombe” que recoge los avistamientos de palomas desde Iparralde, se ratifica el escaso paso de palomas registrado estos días en nuestros cielos.

NAVARRA

Aunque eso sí, el pasado viernes 21 desde los cuatro observatorios vascofranceses apostados en Sara, Banka, Arnegi y Urruña contabilizaron 289.654 palomas, que evitaron nuestros cielos pero sí que constataron los aficionados navarros en sus pasos altos viendo grandes “bolas” de torcaces en sus cielos y que luego se adentraron sobre otras líneas de interior más al sur, como las de la línea de La Herrera, por ejemplo, antes de sobrevolar las tierras riojanas. Un cazador vizcaino desplazado a esta zona calificó de “espectáculo” el paso del viernes, gracias a la multitud de malvices pasadas y las enormes pelotas de palomas azules que pasaban altas sobre sus cabezas.
Y siguiendo con la entrada de migradoras, junto a la intermitente llegada de malvices, también parece que las primeras becadas ya están en nuestros montes. Aunque de forma muy puntual, algunos de los muchos aficionados que salen con sus perros en pos de la dama del bosque ya han obtenido sus primeras recompensas con las primeras capturas.
J.ATXA

DEIA